Esta vez trascribimos la introducción de un libro publicado recientemente en inglés por Ian Allison (Workers can win, Pluto Press, 2022), que es de interés para toda trabajadora y organizadora sindical. En la introducción se analiza de qué va el libro.
Hay fundamentalmente dos razones para organizarse en el trabajo: para cambiar las cosas relacionadas con tu trabajo, y para cambiar todo lo demás. La organización sindical consiste en desarrollar la capacidad de los y las trabajadoras para emprender acciones colectivas eficaces y conseguir cambios. Es la única forma realista para la mayoría de nosotras de tener una influencia real sobre nuestro trabajo, un aspecto enorme de nuestras vidas. No es sólo que el trabajo (o la falta de él) ocupe gran parte de nuestro tiempo y energía. El resto de nuestras vidas está condicionado por el salario, los horarios, las condiciones, los lugares y el estrés. Como individuos, somos relativamente impotentes, por lo que el poder suele verse de forma negativa, como algo que la mala gente tiene sobre nosotras. Pero hay otros tipos de poder. Como dijo Martin Luther King Jr.
"El poder, bien entendido, es la capacidad de lograr un propósito. Es la fuerza necesaria para lograr cambios sociales, políticos o económicos. En este sentido, el poder no sólo es deseable, sino necesario, para poner en práctica las exigencias del amor y la justicia". (King, 2010 [1968], p. 37)
La acción colectiva en el trabajo es una fuente importante de poder potencial para abordar cuestiones más amplias, como la pobreza, la desigualdad, la discriminación, la vivienda, los servicios públicos, la guerra y la crisis climática. La intervención en el trabajo sobre estos temas parece imposible para la mayoría de los trabajadores en Gran Bretaña en este momento, pero históricamente y a nivel mundial la acción colectiva en el trabajo ha sido una parte importante de casi todos los movimientos significativos para el cambio social. Existe una enorme brecha entre las necesidades de los y las trabajadoras y el sentimiento de impotencia que domina actualmente la vida de los y las trabajadoras. Para superar esa brecha es necesario organizarse, y aunque la organización en otros ámbitos también es importante, todos los que se preocupan por la justicia social o medioambiental deberían considerar prioritaria la organización en el trabajo.
Este libro se dirige a los y las trabajadoras que quieren organizarse en el trabajo y, en segundo lugar, a las personas y organizaciones que intentan ayudar a los y las trabajadoras a organizarse. Hay muchas trabajadoras que ya se están organizando y quieren ser más eficaces. Hay mucha más información de calidad. No se trata de tener una visión idílica de las trabajadoras, sino de creer en nuestro potencial, en que la situación adecuada puede sacar lo mejor de nosotras. Aunque estas ideas son primordiales, la técnica, las habilidades y la capacidad de organizar son también esenciales. Es cuando las cosas se ponen difíciles y la rabia de las trabajadoras no nos lleva a superar las dificultades cuando estas habilidades son más importantes.
Organizar no es una cuestión de seguir obedientemente las instrucciones: no hay una "mejor manera" de hacerlo. Las circunstancias varían y también hay un elemento de suerte. Sin embargo, no cabe duda de que hay algunas formas malas de organizarse. Explico algunos principios, ideas y técnicas que suelen funcionar, y te ayudo a evitar algunos de los escollos mientras aprendes y desarrollas tus habilidades. He creado un sitio web asociado a este libro (workers-can-win.info) y allí publicaré las actualizaciones. Me encantaría que me contaras tus experiencias a la hora de organizarte y tus sugerencias para añadir o mejorar lo que he escrito.
Aunque el libro aborda muchos de los problemas a los que se enfrentan los y las trabajadoras, ningún libro podría abarcarlos todos. En su lugar, te indicaré dónde encontrar información y recursos, y te animaré a crear una red de personas. Incluso dentro de Gran Bretaña, la gente de diferentes sectores y sindicatos utiliza una jerga diferente para las mismas cosas o la misma palabra para cosas diferentes. Intento explicar la jerga cuando la encontramos por primera vez, pero puede resultarle útil el glosario, sobre todo si se sumerge en el libro en lugar de leerlo de principio a fin.
Merece la pena explicar algunos puntos. Utilizaré el término "representante" para referirme a un trabajador elegido por sus compañeras para desempeñar un papel en el sindicato en relación con su propia empresa. También es posible que oiga referirse a un representante con nombres como delegado sindical, responsable de rama, funcionario de rama, “Mother or Father of the Chapel”, etc. El término "miembro no profesional" se utiliza ampliamente para referirse a cualquier miembro que no está a sueldo por el sindicato. También hay personas empleadas por los sindicatos para tratar con las trabajadoras y los empresarios. En este libro, me refiero a ellos como "funcionarios remunerados". El término más utilizado en el movimiento es el de "sindicalista a tiempo completo" (FTO), pero no es realmente apropiado dado que pueden trabajar a tiempo parcial. También es posible que se les denomine con términos como liberados, sindicalistas u organizadoras. El grueso del libro está estructurado para seguir el recorrido de una militante, desde que empieza a organizarse en un nuevo trabajo en el capítulo 3 hasta la acción colectiva y directa en el capítulo 9. Es posible que tu propia trayectoria organizativa te lleve a abordar los temas en un orden diferente o a saltarte algunos. Los últimos capítulos (capítulos 10-12) tratan de los retos que puedes encontrarte en cualquier etapa.
En el capítulo 3, cubro algunos de los aspectos esenciales si tienes un nuevo trabajo o empiezas a organizarte por primera vez, incluyendo la búsqueda de aliadas, la seguridad, la recopilación de información, la elección de una central sindical, la formación, el acceso a los recursos y la creación de tu red. Algunas partes de este capítulo también serán útiles para las militantes con experiencia.
En el capítulo 4 se analizan los diferentes modelos de funcionamiento de las centrales sindicales, y cómo a menudo funcionan de forma que dejan a las trabajadoras pasivaos y desvinculadas en lugar de ayudarnos a construir poder. La debilidad de los sindicatos y los cambios legislativos han fomentado un énfasis en el tratamiento de los problemas de forma individual y legalista. Hay que pensar mucho en cómo se aborda el "trabajo de casos", como los procedimientos de reclamación y disciplinarios, para que apoye los procedimientos disciplinarios en lugar de socavar la organización. A lo largo del libro, explico los aspectos relevantes del marco legal en Gran Bretaña, pero por supuesto esto no puede sustituir el asesoramiento legal profesional cuando sea apropiado. El capítulo aborda los derechos de las trabajadoras en torno a algunas cuestiones que suelen generar casos y que son comunes en los lugares de trabajo no organizados: el impago de salarios y el despido. Se abordan las dificultades del trabajo de casos y se concluye con algunas cuestiones comunes de trabajo de casos "no laborales".
La organización eficaz gira en torno a los problemas. En el capítulo 5, se explica cómo elegir los temas en torno a los cuales organizarse y cómo comunicarlos. Esto incluye la primera de las cuatro secciones de "técnicas en detalle", sobre las conversaciones de organización individual.
En el capítulo 6 se presentan muchos más conceptos y técnicas de organización, como la identificación y la conquista de los trabajadores más influyentes, la inclusión sistemática de todos y el conocimiento de su apoyo, y el uso de árboles y redes de comunicación. También aborda las reuniones, la socialización y la democracia, antes de introducir la acción colectiva.
Los gobiernos, los empresarios y los medios de comunicación nos dicen que tenemos ciertos "derechos", pero éstos son limitados, se infringen constantemente y se atacan. Esto quedó bien ilustrado cuando el jefe de P&O, Peter Hebblethwaite, dijo a los diputados que infringió la ley a sabiendas al despedir a 800 empleados sin consultarles. Dejó claro que lo volvería a hacer porque pagar la indemnización era más barato que cumplir la ley. Las leyes y las políticas son útiles, pero depender de ellas limita lo que podemos pretender.
En el capítulo 7, analizo cómo organizarse utilizando los derechos relacionados con los contratos de trabajo, las políticas empresariales, la salud y la seguridad, la discriminación, el despido, las transferencias "TUPE" de los trabajadores entre empresas, la denuncia de irregularidades, el reconocimiento de los sindicatos, el tiempo de las instalaciones y los foros de empleados y los comités de empresa. Aunque la organización en torno a los "derechos" no sustituye a la acción colectiva, muchos activistas se encontrarán utilizando los derechos antes de estar en condiciones de ir a la huelga. Este libro está pensado para ser leído de cabo a rabo, pero es posible que quieras saltarte partes de este capítulo y volver a ellas cuando las necesites. Sin embargo, le recomiendo encarecidamente que lea las secciones sobre contratos de trabajo y "discriminación", que incluyen aspectos fundamentales que todo organizador en el lugar de trabajo debe conocer.
Las trabajadoras pueden conseguir el cambio cuando sabemos quién tiene el poder de conceder lo que queremos y cuando podemos amenazar de forma creíble con emprender acciones colectivas que costarían a estos responsables más que la concesión. En el capítulo 8 se analizan los diferentes tipos de poder potencial de que disponen los trabajadores y las personas con autoridad, cómo elaborar un plan creíble para ganar su campaña y cómo planificar acciones concretas.
El capítulo 9 continúa centrándose en la acción colectiva y profundiza en la acción colectiva y directa. En él se aborda el proceso de acción colectiva, los tipos de acción y los aspectos prácticos de la huelga, la creación de solidaridad, el uso de los medios de comunicación y la resolución de un conflicto.
La dirección no se quedará de brazos cruzados mientras te organizas. El capítulo 10 se centra en las estrategias de la dirección. Comienza explorando las técnicas que utiliza la dirección para intensificar el trabajo y mantener el control, así como la forma de contrarrestarlas. A continuación, analiza cómo responder a los intentos de la dirección de hacer descarrilar, dividir o atacar la organización sindical.
El capítulo 11 comienza analizando cómo utilizar las estructuras y los recursos sindicales más allá de tu propio trabajo. Tratar con un sindicato puede ser bastante desconcertante "su organización va, y sus propias ideas y consejos que podrían compartirse con otras trabajadoras a través del sitio web (workers-can-win.info). La organización y el desarrollo de nuestras capacidades son, al fin y al cabo, tareas colectivas. También utilizaré el sitio web para publicar nuevo material a medida que el mundo del trabajo evolucione, así que le ruego que lo consultes y te suscribas a las actualizaciones.
