La autogestión y el comunismo libertario, a debate en Barcelona

El pasado fin de semana (9 y 10 de Abril) comenzaron en Barcelona las jornadas “alternativas al capitalismo: la autogestión a debate”, organizadas por CNT en el marco de las celebraciones por sus 100 años. Las primeras conferencias, que se prolongarán durante las próximas semanas, estuvieron a cargo de académicos locales y extranjeros que ofrecieron sus respectivos puntos de vista sobre la autogestión, el anarcosindicalismo y los modelos de socialismo y comunismo libertario. Cerca de 100 personas asistieron a las primeras actividades.

La inauguración de las jornadas, impulsadas por CNT en colaboración con la Fundación Anselmo Lorenzo (FAL), el Instituto de Ciencias Económicas y de la Autogestión (ICEA) y la Fundació d’Estudis Llibertaris i Anarcosindicalistes (FELLA), corrió a cargo de los organizadores, quienes destacaron el papel de la confederación como “organización que busca la revolución social, incidiendo en el ámbito laboral-económico, y apoyando otro tipo de iniciativas que permitan luchar contra toda clase de explotación, dominación y autoridad”.

           

“Estas jornadas –reseñaron- tratan las alternativas al capitalismo desde una perspectiva teórica, histórica y actual. La idea de base a la hora de plantearlas es hacer un repaso de las alternativas tanto en términos de sistemas socio-económicos como también de las alternativas parciales al sistema capitalista que pueden representar vías de acción o praxis para sustituirlo”. En ese sentido, señalaron que ante el actual contexto de crisis “muchas voces han cuestionado la viabilidad y el futuro del capitalismo, tanto en su faceta productiva y de crecimiento, como distributiva o respecto a los límites ecológicos con los que se encuentra”. Sin embargo, “muy pocos cuestionan este sistema económico en su totalidad, señalando que el capitalismo no solo no es viable en un futuro no muy lejano, sino que además hoy es un sistema ineficiente, injusto y antidemocrático”.

 

Crisis y propuestas 

En las conferencias celebradas el viernes 9 de abril, la economista Miren Etxezarreta, ex profesora universitaria e integrante del seminario de economía crítica Taifa, inició su disertación sobre la situación actual, empezando con la misma pregunta que daba título a su charla: “¿dónde estamos en la crisis?”. “Hay políticos, financieros e instituciones internacionales que dicen que estamos saliendo de esta situación. Sin embargo, también existen quienes advierten que se están sentando las bases para crisis futuras”, destacó.

 

Si bien indicó que “parece clara una cierta recuperación financiera”, advirtió que “mucho más dudosa es la recuperación real”. “Aún no se ha llegado al fondo de la crisis, estamos en disposición de ir aún más al fondo”, señaló Etxezarreta. En este contexto, habló de la reducción de costes laborales en todos los países ricos, donde los salarios de los trabajadores sufren caídas desde los años setenta.

 

La economista hizo hincapié en el papel que está jugando el sector público en el marco de la actual crisis, “apoyando sin condiciones al capital”, mientras que “el paro aumenta y no se crea empleo”. “Los estados -afirmó- están siendo los parteros del capitalismo para que nazca el niño de la recuperación, pero la recuperación puede no ser estable”. En efecto, Etxezarreta advirtió que “la recuperación, aún si se produce, lleva a sociedades todavía más capitalistas, más explotadas y más duras”. “¿Aguantaremos o renacerá la resistencia? (…) Más importante que luchar contra la crisis es luchar contra el capitalismo, con o sin crisis”, reflexionó.

 

La siguiente conferencia, titulada “El capitalismo hoy: ¿crisis o hundimiento?” estuvo a cargo del economista Toni Castells, quien habló de las distintas crisis vividas hasta ahora por el sistema capitalista, al que situó “en estado decrépito y con un agotamiento irreversible”. Ante esta situación, el académico cree que es momento de “descolonizar nuestro pensamiento, repensarlo todo y pensar por nuestra propia cuenta”.

 

Castells afirmó que la crisis financiera y económica actual “es la manifestación de que estamos asistiendo al hundimiento de la sociedad capitalista”, y señaló que si bien este sistema está muriendo, su fin dará lugar a otra sociedad, “y depende de nosotros de qué modelo sea”.

 

La última charla corrió a cargo del profesor de Economía en Secundaria e integrante de ICEA Gaspar Fuster, quien esbozó las propuestas anarcosindicalistas ante la crisis económica. Previamente, identificó las distintas propuestas lanzadas por la patronal, los partidos políticos y sus medios informativos. En ese sentido, citó los planes de reforma laboral, que empeorarán las condiciones de quienes tienen contratos fijos, facilitarán el despido, pasará por encima de los convenios colectivos y ampliarán la movilidad “funcional y territorial” de quienes aspiren a encontrar un puesto de trabajo. Ante esta situación, el anarcosindicalismo propone medidas de intensidad variable -reformistas, progresivas y transformadoras-. Entre ellas se encuentra la reducción de la edad de jubilación a los 55 años (percibiendo el 100% del salario), la eliminación de la subcontratación y de las ETTs, así como  la integración en plantilla fija de quienes estén con este tipo de contratos.

 

También se busca repartir el empleo, lo cual se lograría reduciendo la jornada de trabajo y manteniendo el salario. En ese sentido, el anarcosindicalismo propone rebajar el horario laboral a 30 horas semanales, lo que generaría cuatro turnos diarios, y la eliminación de las horas extras. Otras de las propuestas formuladas por el integrante de ICEA apunta a la ocupación y autogestión de las empresas cerradas por sus patronos y, en el caso del campo, la confiscación de los latifundios, que serían puestos en manos de personas sin empleo. 

 

Al término de la jornada, los conferencistas y el público continuaron intercambiando opiniones sobre las distintas propuestas y análisis planteados a lo largo de la tarde.

 

Autogestión y comunismo libertario

Las actividades del sábado 10 de abril comenzaron por la mañana con una presentación de ICEA a cargo de Luis Buendía, quien desgranó los motivos que dieron a lugar al nacimiento de este instituto, que tiene como referente histórico el “Institut de Ciencies Econòmiques de Catalunya” (ICEC), creado en 1931 en Barcelona. Esta entidad organizó hasta 1939 cursos, conferencias y debates sobre temas económicos y sociales, y el ICEA pretende cubrir el vacío dejado por ella. Unas 75 personas asistieron a los actos de la mañana.

 

“Desde ICEA se trabaja para la difusión de las ideas anarcosindicalistas y anarquistas, de forma totalmente pública y reconocida. Se pretende por ello que el trabajo de la entidad sirva para que, quien lo considere oportuno, utilice aquello que considere interesante, y al contrario, que pueda desechar o no utilizar aquello otro que no le sea de utilidad”, explicaron sus miembros. En ese sentido, destacaron que este instituto busca ser un “motor cultural más del anarquismo y el anarcosindicalismo, de los muchos y muy buenos que existen. Creíamos que era necesario crear algo hasta cierto punto nuevo, hasta cierto punto diferente de lo que históricamente han sido las entidades culturales anarquistas y anarcosindicalistas”.

 

Insistieron en la necesidad de que “una mayoría de los trabajadores conozcamos el funcionamiento de un sistema económico de forma que podamos gestionar una economía libertaria, una economía y una sociedad controlada por, y al servicio de, las personas trabajadoras”. Por este motivo, desde ICEA se pretende “poner fin a la actual inexistencia de estudios que profundicen en el análisis de las alternativas al sistema capitalista”. 

 

 “El ICEA no nace para mantener las ideas anarquistas en la parálisis de unos cuantos conceptos cristalizados en el tiempo o en la rememoración de un pasado glorioso. Nace para comprometerse, para acertar o equivocarse, y sobre todo para proyectar en el presente y en el futuro la Idea revolucionaria. Sin futuro el anarquismo no es nada”, resumió.

 

Otro miembro de ICEA, Lluis Rodríguez, ofreció una conferencia sobre el socialismo y comunismo libertario en el pensamiento económico hasta 1939.  Tras citar a los principales autores que en aquellos años habían teorizado sobre las vías para la aplicación de este sistema -principalmente el anarquista español Isaac Puente y el francés Pierre Besnard-, Rodríguez destacó la influencia de estos pensadores en la revolución española de 1936. “Aquellas ideas -afirmó- impulsaron una revolución social sin precedentes”.

 

El integrante de ICEA estableció un nexo entre aquel proceso histórico y la situación de crisis actual, destacando que en el marco presente resulta necesario “avanzar en las reflexiones sobre cómo acabar con la pobreza y, sobre todo, ser nosotros mismos quienes tengamos el control de nuestras propias vidas”.

 

Siguiendo en la línea presentada por Rodríguez, otro miembro de este instituto, el profesor de Economía de la Universidad del País Vasco Endika Alabort, habló sobre la autogestión como planificación participativa o reconceptualización del mercado. En otras palabras, se trató de un “análisis de varios modelos técnicos libertarios y participativos de autogestión de la economía”.

 

Alabort remarcó el concepto de autogestión “entendida no como una herramienta de supervivencia dentro del sistema capitalista, sino como herramienta para la superación del mismo”. Para ello, analizó los modelos teóricos propuestos por autores que, como Gastón Leval y Abraham Guillén, proponían la desaparición del estado y la autogestión obrera, o sistemas en los que el estado no dejaría de existir, como los impulsados por Pat Devine y David Schweickart. Por último, analizó los acuerdos alcanzados por la Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT, a la cual pertenece CNT), y la Internacional de Federaciones Anarquistas (IFA), entidades que desde el punto de vista económico propugnan, por encima de todo, el fin de la explotación del ser humano por el ser humano.

 

Por la tarde, con una asistencia de más de 200 personas en las ponencias, Jon Bekken, miembro de Anarcho-Syndicalist Review, empezó planteando sus conceptos sobre la economía de la libertad como “creación de una vida plena para todos”. “Cualquier economía que queramos debe partir de la satisfacción de las necesidades humanas, y no sólo de las más básicas -alimentación, vivienda o sanidad-, sino también de las culturales”, reseñó. 

 

Bekken apostó por la abolición de los mercados y los salarios, acompañado por la gestión social de la producción. En ese contexto, propuso la reducción del horario laboral a 20 horas semanales, “más que suficientes para satisfacer las necesidades”. El miembro de IWW subrayó también la importancia de definir “cómo se realizará la transición” hacia el nuevo sistema, destacando que el anarcosindicalismo “no sólo ofrece la posibilidad de una revolución, sino que también deja sentadas las bases de la nueva sociedad a la que aspiramos” .

 

Posteriormente, Takis Fotopoulos, filósofo político y ex catedrático de Economía de la Universidad North London (Reino Unido) -donde enseñó Economía Política durante 20 años- ofreció una conferencia sobre la “democracia inclusiva como proyecto político para una nueva síntesis libertaria”. Precisamente, Fotopoulos ha sido editor de las publicaciones Democracy & Nature y The International Journal of Inclusive Democracy, además de ser el fundador del movimiento Democracia Inclusiva.

 

Durante su intervención, expuso las claves que sustentan esta línea de pensamiento, que defiende la democracia directa, económica, ecológica y en el ámbito social, además de la creación de un nuevo sistema de valores. La propuesta de Democracia Inclusiva implica el fin del estado, los mercados y el dinero, dando paso a la propiedad popular de los medios de producción y la distribución confederal de los recursos, lo cual se gestionaría mediante asambleas que funcionarían en los distintos ámbitos de la sociedad, tanto a nivel local como sectorial. 

 

La última conferencia corrió a cargo de otro invitado extranjero, el profesor emérito de la American University, Robin Hahnel, quien enseñó Economía Política durante 33 años. Actualmente es profesor visitante en la Portland State University. Asimismo, es el creador junto a Michael Albert del modelo económico denominado “Participatory Economics, PARECON (Economía Participativa).

 

El académico dejó claro que “la sociedad aborrece los vacíos de gestión. Si las personas no gestionan sus vidas, una élite económica lo hará en su lugar”. Por ello, se mostró partidario de la planificación participativa de la economía, que se realizaría mediante consejos de trabajadores y consumidores. “La planificación autoritaria niega a los trabajadores la capacidad de decidir, mientras que la gestión participativa de la economía permite que sean los afectados quienes se pronuncien directamente”, sintetizó.

 

En el debate final, el numeroso público comentó las ideas expuestas por los tres ponentes, quienes tuvieron ocasión de intercambiar opiniones e ideas con los asistentes. 

 

Las jornadas sobre autogestión continuarán los próximos viernes 16 y sábado 17 con la intervención de académicos locales y extranjeros que disertarán sobre los distintos aspectos de las colectivizaciones anarquistas durante la guerra civil española (1936-1939).

 

http://www.autogestion2010.info